La situación actual tiene dos claras vertientes:
Por un lado el Proyecto de Función Pública, que ha explicado la Ministra en sede Parlamentaria, que pasa por reducir la temporalidad, regular el teletrabajo, una de Ley de Función Pública para la Administración General del Estado y un Acuerdo de Legislatura Administración – Sindicatos.
Por otro lado la cruda realidad que es la ruptura de la confianza, tan necesaria para la Negociación Colectiva, tanto en lo sectorial (ahí están los ejemplos de los colapsos en el SEPE y en las EGSS) como en lo general por un lado por la lentitud exasperante en el desarrollo de los Acuerdos (las Ofertas Empleo Público, la Estabilización de empleo temporal o el Concurso Unitario de Personal Funcionario). Y, lo más grave, los incumplimientos que han generado la ruptura de la confianza:
o Fondos Adicionales de 2019 (Acuerdo de niveles) y de 2020.
o Grupo de Teletrabajo que contenía el Acuerdo del 4 de Mayo.
o Y sobre todo del IV Convenio Único, que un año y medio después de su firma está sin desarrollar mínimamente y absolutamente paralizado.
Hay que hacerse una serie de reflexiones en el sentido de cómo abordamos la negociación de una Ley para la AGE si no hemos cumplido el Acuerdo de Niveles Mínimos, o cómo podemos abordar la eliminación de ese triste record que ostenta la AGE de diferencias salariales tremendas entre laborales y funcionarios si no ponemos en marcha el Convenio Único.
Dos recetas, propuestas o conclusiones para solucionar el deterioro de estas relaciones laborales:
1. Igualdad: porque de la crisis hemos de salir todos juntos, y menos dejar atrás a los más desfavorecidos. Debe cumplirse el principio de igualdad.
2. Confianza: es imprescindible que se cumpla lo acordado para recuperar la confianza para abordar nuevas negociaciones.
Desde UGT esperamos que el Gobierno cambie en septiembre de actitud, sobre todo después de que se haya aclarado y acordado en Europa el sistema de Fondos para salir de la crisis y podamos iniciar por la vía de la Negociación Colectiva el proyecto modernizador de Función Pública.